domingo, 25 de octubre de 2009

HERMANO…

Me miras como mirando a quien nadie ve…
Me oyes como oyendo a quien nadie oye…
Y yo perdida en tu sonrisa de antaño,
te busco donde nadie te ha buscado.
¿A dónde fue a parar tu sueño de extraño rumbo?
¿A dónde fuiste a parar tú?
Estoy de tu lado,
aunque no sepa de qué lado estamos…
Para abrazarte espero un instante en tus manos,
para quererte tengo toda la vida esperando.
Abre tus ojos a la esperanza de un nuevo día,
sal del silencio… ¡aquí grita la vida!
Dame tus lágrimas…que yo puedo secarlas,
te doy mi alegría…que tú puedes cargarla.
Si de mi parte un soplo de ensueño recibes
no lo evadas, que, aunque me quede sin aliento,
para que marches hacia el nuevo destino
yo me detengo, si es mi destino.

Cali, enero 4 de 2006.

No hay comentarios: